Aunque parezca contradictorio, en realidad nuestro cuerpo retiene líquidos como medida de defensa. Es una respuesta ante el temor a la deshidratación, por lo que se acumulan para prevenir futuros desajustes. Aquí está el origen de esa sensación de estar hinchada, las molestias y la aparición de la celulitis.

Sin embargo, no debes preocuparte, ya que todas nos hemos sentido así en algún momento y existen técnicas muy eficaces para combatir la retención de líquidos. En la entrada de hoy os vamos a mostrar las ventajas de llevar un estilo de vida saludable y hablaremos sobre el masaje linfático, tu mejor aliado en esta batalla.

¿Cómo detectar la retención de líquidos?

La retención se caracteriza por un cambio de peso, hinchazón en la zona del estómago y cierto malestar. No obstante, estos síntomas también pueden deberse a otros motivos. ¿Cómo diferenciarlos? Un método muy sencillo consiste en apretar firmemente con un dedo sobre la zona del estómago o aquella que presente hinchazón y después soltar.

Si observas que la marca es visible durante unos segundos posiblemente se trate de una retención de líquidos, por lo que es el momento de ponerse a trabajar para hacerla desaparecer. En cualquier caso, siempre es buena idea acudir a un especialista para que emita un diagnóstico.

¿Cómo prevenir la retención de líquidos?

Muchas mujeres piensan que solo es necesario hidratarse. No obstante, además de beber al menos un par de litros de agua cada día no nos va a quedar más remedio que llevar un estilo de vida más activo. Nuestro organismo necesita liberar toxinas y eso solo se consigue haciendo ejercicio con regularidad. También puedes consumir infusiones de romero y diente de león, que ayudarán en esta tarea.

La alimentación es otro aspecto esencial, por lo que debes hacer trabajar a tus riñones lo menos posible, aumentando de esta forma su capacidad para depurar el cuerpo. En este sentido, existen una serie de alimentos que favorecen la retención de líquidos y que deberían estar en tu lista negra, como por ejemplo la sal, los embutidos, los fritos, el alcohol y en general toda la comida procesada.

Drenaje linfático

El complemento perfecto para la dieta y el deporte es el drenaje manual, un tipo de masaje depurativo que actúa revitalizando el sistema linfático y ayuda a limpiar el organismo. Esta técnica debe ser desarrollada por masajistas cualificados como los que puedes encontrar en Bi&Be, con años de experiencia a sus espaldas y títulos homologados.

¿Es posible eliminar otros problemas derivados de la retención de líquidos? Pues sí. Y si estás pensando en la celulitis o las varices la respuesta está en la presoterapia, un drenaje linfático que a diferencia del anterior es mecánico. Se recomienda también en casos de retenciones severas y se puede combinar con el manual.

¿Cuánto tiempo he de esperar para ver los resultados? Si mantienes una dieta equilibrada, haces ejercicio y realizas regularmente masajes linfáticos para drenar líquidos y eliminar toxinas, en un tiempo aproximado de 3 meses comenzarás a notar los efectos, con un cambio significativo en tu silueta y una notable pérdida de peso.